Quisiéramos ver a Jesús”. Es el deseo de estos gentiles que se acercan a Felipe. ¡Deseo de VER! Y Jesús se les manifiesta en todo lo que es: Una vida plena y entregada. Una vida centrada en lo esencial, una vida sembrada en el surco de la vida, que “muere”, pero que florece llena de fruto. ES LA HORA de vivir de otra manera. Es la hora de despojarnos de nuestro ego que solo busca “satisfacer” sus necesidades y acoger la Vida, la “cruz” de cada momento. Es la hora de ser consciente que nuestra existencia es ya plena. La “agitación” por lo que nos ocurre fuera se disuelve volviendo a las manos del Padre. Es la hora de pasar de un Dios pensado a un Dios vivido. ¿Nos “atrae” este Jesús? ¿O buscamos a otro…?
Feliz domingo. Un abrazo.

