La comunidad de seglares cristianos del pilar, acudimos al encuentro de nuestros hermanos de la provincia Bética con más ganas que nunca. Nuestra comunidad es joven, en un movimiento eclesial joven, formado por laicos de todas las edades y condiciones.
Un fin de semana sumergidos en una variedad familiar: políticos, abogados, empresarios, administrativos, psicólogos, médicos, enfermeros, diseñadores, parados; novios, solteros, casados, viudos, padres, hijos, abuelos... Totalmente diferentes, pero en familia.
Unidos por un carisma intangible que nos urge a dar a conocer a Dios como se pueda, y en donde se pueda. Unidos en el quién. Diferentes en el cómo.
Y en este hermoso encuentro quisimos abandonarnos a Dios, olvidándonos de nuestras vidas. Nos ofrecimos a lo que Dios mismo quisiera, y cogió a Nieves. La quiso como coordinadora de la provincia para los próximos tres años.
Y así volvimos. Cambiados, con más familia, con una coordinadora en la maleta, y con el encargo de cuidarla los próximos años.
