Testimonio *13 - II Encuentro de Seglares Claretianos

martes, 12 de noviembre de 2013

Ana Lourdes, que pertenece a la comunidad de seglares claretianos de la parroquia, nos cuenta su experiencia sobre el II Encuentro de Seglares Claretianos del Norte y Bética.

Mi nombre es Ana Lourdes y pertenezco a la comunidad de Seglares Claretianos de la parroquia y ahora más que nunca puedo decir, que pertenezco. 

Ser “Testigos de la Fe”, esa fue la clave que nos reunió en Madrid, en el II Encuentro de Seglares Claretianos de las regiones del Norte y de Bética. 

Este encuentro ha supuesto, el sentirme acogida por una gran familia de cristianos, a los que nos mueve un mismo carisma, el claretiano, un carisma misionero y evangelizador. Además para mí ha sido un momento especial porque además de ser el primer encuentro de seglares al que acudía, he hecho mi entrada al movimiento de manera formal. Un gran movimiento de seglares y eso supone una gran responsabilidad, porque me piden que sea testimonio de Fe en mi mundo, con los que me rodean. 

Destaco de este encuentro varias cosas, una de ellas, la alegría, la serenidad, el entusiasmo de todos los que allí estaban, por trabajar en las distintas pastorales de sus parroquias, sabiendo que hay muchas dificultades en el día a día, pero sabiendo que nos acompaña el Señor en esta tarea y que Él nunca pondrá en nuestro camino nada imposible. 

Resuenan también en mi cabeza palabras como “los cristianos tenemos que ser escándalo por nuestra austeridad, nuestro servicio, no por otras cosas. El programa de escándalo de los cristianos tendrían que ser la Bienaventuranzas”. 

“Como cristianos, DAR TESTIMONO no es algo que buscamos, es algo que BROTA. Además nosotros no damos a Dios a los demás, sino que les hacemos descubrir que Dios ya está en ellos. Porque no tenemos a Dios, queremos que Dios nos tenga a nosotros.”

“Y el único poder del cristiano, es el PODER DE SERVIR A LOS DEMÁS. Dando sabor (como la sal) y siendo luz en nuestra sociedad. Tenemos que ESTAR, CONVIVIR, CUESTIONAR, SERVIR Y EXPLICAR como Dios ha cambiado mi vida, para luego INVITAR a que los demás también quieran conocer y dejarse AMAR por Jesús.”

Después de unos días de compartir con seglares como yo, llego a mi casa y a mi parroquia llena de entusiasmo, alegría, esperanza y energías renovadas porque Dios es el único capaz de reunir a una gran familia como la de los Seglares Claretianos, todos tan diferentes y a la vez tan iguales.