HOJA PARROQUIAL 186

domingo, 22 de noviembre de 2020

Cristo es el Rey. Este título está más allá de todo concepto o de toda imagen limitante que podamos hacernos de él. Jesús es el Señor, el Rey, el amor incondicional, el perdón, la misericordia, la sabiduría. Es el hombre despierto, es el Dios-con-nosotros. Hoy nos revela que su presencia está asegurada en los “más humildes hermanos” “La mente religiosa” está siempre preocupada por amar a Dios ¿Qué Dios? ¿El creado a nuestra imagen y semejanza?  No nos compliquemos la vida. A Dios se le ama, aunque no lo sepamos ni lo veamos, amando y sirviendo. TODO ES PURA GRATUIDAD. Para amar, para la GRATUIDAD, hay que ser “Rey y Señor”.  Y para “Ser Rey y Señor” tenemos que dejarnos amar gratuitamente (¡no hay méritos!). De otra manera,  entraremos en un callejón que no tiene salida (infierno), siendo esclavos de los acontecimientos y de nuestras creencias, de las recompensas y los castigos. El “juicio”, al que muchos tanto temen, se da en cada instante. Si amas, estarás en el gozo y si no amas, estará “rechinando” tu ego. Esta es la religión de Jesús. Somos señores con el Señor. Disfrútalo, y vívelo. Este es el propósito de todo ¡Que tengamos vida!
Un abrazo.